¡Enséñanos tus caminos!

DEVOCIONAL DE HOY - Viernes 28

Salmos 32:8 “Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar…”.

Isaías 55:9 “Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que sus caminos y mis pensamientos más altos que sus pensamientos”.
Hebreos 10: 19-20 “teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo, por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo…”.
Uno de los grandes problemas que tenemos en el Reino de Dios es poder entender a Dios con una mente natural. Esto se refiere a una mente que evalúa, define y concluye a través de un razonamiento lógico. Por eso la palabra de Dios despierta el ser espiritual en nuestro interior y así podemos caminar los caminos preparados por Dios para Ganar.

Todo lo que proviene de Dios es sobrenatural porque esa es Su naturaleza. No sigue ni se amolda a los límites naturales. Por eso, cada palabra oída, creída y accionada te adentra a una vida sobrenatural de fe maravillosa, de triunfos y victorias aseguradas.

Es momento de decirle a Dios “Padre, no te limito más; deseo todo lo sobrenatural, lo milagroso funcionando en mi vida, me abro a Tus experiencias divinas, a ver tus señales, a caminar tus caminos”. El diablo buscará desenfocarte a través de los sentidos, de lo que oyes, de lo que ves, a través de los sentimientos… por eso, en momentos de conquistas, todo tu ser (cuerpo, alma y espíritu) deben estar de acuerdo en lo mismo, y aunque todo te es lícito, no todo conviene al propósito eterno que Dios tiene para ti. Recuerda “eres un hombre o una mujer llamados para ganar”.

Declaración de hoy:
“Hoy entiendo que el único camino para ganar es el camino sobrenatural que proviene de Dios. Por eso renuncio a todo pensamiento que lo limite, que me estreche. ¡Creo en lo milagroso! ¡Las señales serán parte de mi vida! En mi vida nada sucede por casualidad… hay un plan predestinado para mi. Le hablo a mi mente: “nunca más tus razonamientos y conclusiones me impedirán ver lo que Dios ve; escucha lo siguiente: Si Dios lo dice, yo lo creo y Dios lo hace”. Le hablo a mi cuerpo y a mis sentimientos: “se sujetan a lo divino, obedezcan al espíritu, no vivo de ustedes, sino que ustedes se alimentan de la palabra, y sirven para el propósito divino de ganar para mi vida”.

Acción del día:
1.- Hoy es un día de señales; después de esto pedirás al Señor señales divinas para tu vida; está atento a las respuestas divinas; ángeles se toparán contigo, y lo sobrenatural te espera.

2.- Recuerda que la Palabra de Dios enseña que “las señales siguen a los que creen”… Por lo tanto, ¡cree! También debes observar que las señales, en la Biblia, eran confirmación “de lo que se estaba predicando”. Por lo tanto, ¡predica! Si crees, y predicas lo que crees, es inevitable que las señales vengan a ti.

3.- Piensa en alguien que está necesitando un milagro de Dios. Ve a su casa, háblale del poder de Cristo, y ora por él/ella. Cree con todo tu corazón que el milagro de Dios respaldará tu predicación del evangelio.