DEVOCIONAL DE HOY - Lunes 10
Lucas 4:3: “Entonces el diablo le dijo: si eres hijo de Dios di a esta piedra que se convierta en pan”.
EL DIABLO TENTÓ A JESÚS EN EL DÍA EQUIVOCADO.
Probablemente, al ver a Jesús atravesando un ayuno de 40 días, en el desierto, el diablo pensó: “Lo voy a tentar a Jesús ahora porque está más débil”, ¡pero se equivocó!
Pablo dice en 2 Cor. 12:7-10: “Y para que (la grandeza de las revelaciones) no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera; respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí. Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte”.
CRISTO ESTABA DÉBIL EN LA CARNE PERO PODEROSO EN EL ESPÍRITU.
Esta es una constante: el diablo tiende a tentarnos cuando estamos débiles en la carne
Pero, piensa: ¿Cuándo has ganado tus mayores batallas? cuando pensaste que no podías hacer nada más:
• Que ese trabajo no te lo iban a dar
• Que tu hijo no regresaría a casa
• Que tu hijo no iba a dejar las drogas, el alcohol.
• Que nunca te ibas a sanar
Cuando eres débil en lo natural, es cuando más fuerte eres en el Señor, porque Él es tu fuerza y se glorifica en tu debilidad.
En cambio, cuando piensas que todo lo puedes hacer solo, ni hace falta que el diablo te tiente porque es derrota segura…
Los orgullosos caen porque creen que lo pueden hacer sin Dios, porque confían en su propia sabiduría, en sus fuerzas. Su orgullo es “más fuerte” que Dios.
El orgulloso no reconoce que Dios lo hace todo.
El orgulloso se cree invencible, es el principio de su caída.
¿Por qué nosotros te motivamos continuamente a congregarte, a participar de un Grupo de Crecimiento, a orar, a testificar? Porque todos decimos “es que me siento débil, no estoy preparado, no sé cómo hacerlo”. Pero, mira la que dice el apóstol Pablo en 2da Corintios 12:10: “Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte”.
Por eso, cuando el diablo venga a tentarte, dile: “¡¡te equivocaste de día!! Me verás físicamente débil, pero ¡¡soy PODEROSO EN EL ESPIRITU!!
DECLARACIÓN DE HOY:
“Hoy declaro que mi fortaleza está en Cristo Jesús. Permanezco escondido en Él… confiado en Él… esperando en Él… Y, aunque el diablo me vea llorando por la situación que esté atravesando, la fuerza de Dios está en mí. Mi carne es débil, pero mi espíritu se fortalece en Cristo Jesús”.
ACCIÓN DEL DÍA:
1) Tómate unos minutos especiales para dar gracias por la fuerza que Dios imprime a tu vida. Adórale con todo tu corazón, reconociendo que, si no fuera por Su Espíritu en ti, estarías vencido.
2) Piensa en alguien que necesita escuchar esta verdad… quizá un familiar o un amigo que se encuentra en medio de luchas, y se siente debilitado. Copia este devocional, y envíaselo… o, mejor aún, ve a visitarlo y compárteselo personalmente. Invítalo a hacerse amigo del Facebook de la Iglesia “El Camino” para que cada día reciba un mensaje de ánimo como el de hoy.
