Semana 5 – Día 4:
En Juan 7:37 al 39 dice: “En el último día, el más solemne de la fiesta, Jesús se puso de pie y exclamó: ‘si alguno tiene sed que venga a mí y beba. De aquel que cree en Mi como dice la Escritura, brotarán ríos de agua viva’”.
¿Cuándo pronunció Jesús estas palabras? Lo hizo en el último y gran día de la fiesta de los Tabernáculos. Era la fiesta en la que los judíos recordaban su éxodo por el desierto y lo hacían armando cabañas que representaban los años que no tuvieron hogar… recordaban todas las muestras del poder de Dios en el desierto (el Mar Rojo, la columna de nube y de fuego, el maná, y el agua en la roca). Jesús estaba en medio de la multitud cuando se levantó y gritó: “SI ALGUIEN TIENE SED, QUE VENGA A MI Y BEBA...”
Las Escrituras dicen que desde el interior del que cree brotarían ríos de agua viva.... El pueblo de Israel había transitado un proceso de alejamiento de Dios, se habían trasladado de lo real a lo ritual... Ya no vivían bajo una atmósfera de milagros... Ahora existían un conjunto de reglas, rituales, costumbres SIN UNA INTIMA RELACION CON EL PADRE... Ahora Jesús estaba parado en medio, invitándolos a vivir LO SOBRENATURAL una vez más... delante de ellos estaba el mismo que los había guiado, guardado y alimentado por el desierto y ellos no lo entendían.
En 1ra Corintios 10:4 dice: “Y ellos bebieron la misma bebida espiritual, porque bebían de la roca espiritual que los seguía y la roca era el Mesías...”
Como es absolutamente factible que a nosotros nos pase lo mismo, hoy tenemos que hacer la esta pregunta: ¿QUE CLASE DE AGUA ESTAS TOMANDO? Todos tenemos sed (y no me refiero a la sed fisiológica, sino a la sed de justicia, de paz, de gozo, de salud, de prosperidad, etc., etc., etc.), y en algún momento iremos a alguna “fuente” para saciar nuestra necesidad. Pero debes saber que CUANDO TOMAS DEL AGUA EQUIVOCADA VIVES SIN PODER...
Nos damos cuenta que estamos yendo a una fuente equivocada cuando, por ejemplo, nos conformamos con saber que la Palabra habla de SANIDAD, pero no clamamos por ella... ¡Claro! Corremos de un lado para el otro buscando sanidad, buscando alguien que nos atienda para ser sanos, pero la oración suele ser el último recurso… Esto es una señal de que estén estamos bebiendo del agua equivocada.
Otro ejemplo: sabemos que la palabra que Dios nos dio como congregación es la palabra “LIBERTAD”… pero seguimos viviendo en ataduras de temor, depresión, lujuria, ira, amargura, etc.... vivimos SECOS Y SEDIENTOS de libertad... Esta es otra señal de que estamos bebiendo del agua equivocada.
Jesús sigue invitándonos, si estamos sedientos, a venir a El...
En Juan 7:38 y 39, Jesús dice así: “De su corazón, brotarán ríos de agua viva”. 39 (Con la expresión «agua viva», se refería al Espíritu, el cual se le daría a todo el que creyera en él” ¡¡Hay una promesa firme!! ¡¡No la desechemos!! No hay otra “agua” que calme la sed…
En estos minutos de reflexión, vuelve a preguntarte a ti mismo: “¿QUE CLASE DE AGUA ESTOY BEBIENDO? ¿ESTOY TOMANDO DEL RIO DEL ESPIRITU? ¿CORREN POR MI INTERIOR RIOS DE AGUA VIVA?”
Ora al Padre Celestial ahora, diciendo: “Señor, quiero aprender a presentarme delante de Ti cada día en sacrificio vivo, santo, que es mi culto racional... QUIERO BEBER CADA DIA DE TU FUENTE… SER SACIADO SOLO POR TI… Y ASÍ, SALPICAR TU AGUA VIVA A TODOS LOS SEDIENTOS QUE COMPARTEN CONMIGO EL DIA A DIA... En el nombre de Jesús. Amén.”
Rut Sorhochar
