DIA 39:
Texto del día:
Hechos 9:10-19 “Había entonces en Damasco un discípulo llamado Ananías, a quien el Señor dijo en Visión: ¡Ananías! El respondió: ‘heme aquí, Señor’. El Señor le dijo: ‘levántate y ve a la calle que se llama Derecha, y busca en casa de Judas a uno llamado Saulo, de Tarso, porque él ora, y ha visto en visión a un hombre llamado Ananías, que entra y pone las manos sobre él para que recobre la vista’. Entonces Ananías respondió: ‘Señor: he oído mucho acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén; y aun aquí tiene autoridad de los principales sacerdotes para prender a todos los que invocan tu nombre’. El Señor le dijo: ‘Ve, porque instrumento escogido me es este para llevar mi nombre en presencia de los gentiles y de reyes y de los hijos de Israel; porque yo le mostraré cuanto le es necesario padecer por mi nombre’. Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: ‘Hermano Saulo, el Señor Jesús que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo’. Y al momento le cayeron de los ojos como escamas, y recibió al instante la vista; y levantándose fue bautizado. Y habiendo tomado alimento recobró fuerzas. Y estuvo Saulo por algunos días con los discípulos que estaban en Damasco”.
Enseñanza del día:
Los discípulos no nacen por un programa, sino por gente con vientres dispuestos a traer al mundo hijos espirituales.
Toda persona que será formada como discípulo tiene:
1) Un pasado oscuro. En Hechos 9:13 Ananías dice de Pablo: “…he oído mucho acerca de éste hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén…”. Generalmente cuando nos acercamos a Jesús no tenemos un buen prontuario, pero Él es especialista en gente con un pasado oscuro y transformarlos de una mujer samaritana pecadora a una gran evangelista; de María Magdalena, una prostituta, a una servidora de Jesús; de un recaudador de impuestos usurero como Mateo a un discípulo; de Saulo, un asesino de cristianos, a un Pablo, el gran predicador. No debemos menospreciar a quien Dios nos entrega, porque podemos estar frente “al Pablo” para la nación, ni debemos enfocarnos en el pasado sino en lo que puede hacer Dios con sus vidas en el presente y en el futuro.
2) Necesidad de un encuentro con lo sobrenatural, un encuentro profundo con Dios y un encuentro profundo consigo mismo. Hechos 9:11 dice: “…y busca en casa de Judas uno llamado Saulo, de Tarso; porque he aquí, él ora”… y Vs.17: “el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo”. Los retiros que solemos hacer, y la involucración en los Grupos de Crecimiento, son vitales en la vida de un nuevo convertido, porque muchos nos acercamos a Jesús con información acerca de Él pero sin conocimiento de Él; por eso Job 42:3 dice “¿quién es el que, falto de entendimiento, oscurece el consejo? Así hablaba yo, y nada entendía; eran cosas demasiado maravillosas para mi, que yo no comprendía.”
3) Requieren un cambio marcado en sus vidas. Cuando se ha tenido un encuentro verdadero con el Señor, no se puede seguir siendo el mismo. Hechos 9:20 dice: “En seguida predicaba a Cristo en las sinagogas, diciendo que éste era el Hijo de Dios. Y todos los que le oían estaban atónitos.” Esto sucede porque Dios revela propósito y se produce un cambio de dirección de vida a través del arrepentimiento, y un quebrantamiento del alma cuando Dios toca la fuerza natural del hombre. Lo encontramos ejemplificado en el cambio de nombre, de Jacob a Israel, una nación; de Saraí a Sara; de Simón a Pedro.
4) Necesita un guía espiritual. Un verdadero guía espiritual es primero un discípulo… ¡Ananías era un discípulo! Pero también es un padre; Pablo fue un gran predicador pero también fue un gran padre espiritual. Los padres espirituales se caracterizan porque dan a luz, son formadores, dan amor, disciplinan, discipulan, corrigen, buscan obediencia; por eso Pablo se refiere a Timoteo como su “verdadero hijo en la fe”. Tenemos un llamado sobrenatural a formar, no seguidores de Jesús que solo están si se le suple sus necesidades, sino discípulos que lo manifiesten y que sean generadores de milagros, portadores de una visión para las multitudes.
Declaración de fe:
“He sido llamado a ser un formador de discípulos, por eso yo soy un discípulo y también un padre, un guía espiritual que llevaré a cada una de las personas que ganamos a un encuentro más profundo con Dios y con sus vidas; soy un formador de vidas, un generador de milagros, porque cada vida transformada es un milagro de Dios en la tierra.”
Acción del día:
1.- Recuerda, estamos trabajando en ganar, y discipular personas… Estamos en medio de la campaña “Uno Más Para Cristo”. Esto va desde visitas en sus casas, citas o llamadas telefónicas, con la finalidad de afianzarlos, hasta llevarlos a una reunión de Grupo de Crecimiento, o una reunión general de la iglesia, donde será formado en su crecimiento.
2.- Tu eres el testimonio viviente del Reino de Dios en la tierra; cuida tu manera de hablar, de expresarte, las motivaciones por las cuales realizas este trabajo, tu nivel de compromiso y responsabilidad; durante estos días te estás preparando para ganar; sal y conquista las vidas para Cristo.
